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Domingo 21 de marzo del 2004
LAS SUPOSICIONES ALEGRES
Por
Hernán Maldonado
El diputado Juan Gabriel Bautista tácitamente fue reprochado por sus colegas por haber dicho "alegremente" que Bolivia y Chile negocian en secreto un canje territorial, extremo rotundamente negado por las cancillerías de La Paz y Santiago.
"La versión del diputado es infelizmente una mentira que no tiene asidero, ni siquiera en una probabilidad de confusión, porque en ningún momento la Cancillería de la República informó a los miembros de la Comisión Mixta Marítima sobre tales extremos", dijo Omar Montalvo, presidente de esa órgano de la Cámara Baja.
Montalvo y el senador Leopoldo Fernández fueron designados para oficiar de portavoces del trabajo de esa Comisión, para evitar que algún parlamentario, por su cuenta y riesgo, como en el caso de Bautista, lance versiones sin asidero alguno.
Bautista, diputado por el Movimiento Indígena Pachakuti (MIP), ocupó la semana pasada grandes espacios de la prensa en Bolivia y Chile tras sus "revelaciones" de que las cancillerías de los dos países negocian en secreto el canje del Salar de Uyuni y el Cerro Colorado por una franja marítima para Bolivia.
"No se puede decir alegremente las cosas, para luego no poder sustentarlas", sobre todo teniendo en cuenta "lo delicado del asunto", dijo Montalvo al insinuar la posibilidad de que Bautista comparezca ante la Comisión de Etica de la Cámara Baja.
Anteriormente el canciller Juan Ignacio Siles negó "rotundamente" la versión de Bautista y lo propio hizo el vicecanciller chileno Cristián Barros, para quien "ni ahora ni en el futuro está contemplado un canje territorial".
Montalvo, citado por la prensa paceña, dijo que Bautista no pudo dar una explicación coherente sobre cuál era la información que respaldaba su denuncia, por lo que se llegó a establecer que sólo habló de suposiciones.
Pero Bautista insiste en su versión y dice que el nombramiento de Montalvo y Fernández "no impedirá que continúe denunciando los intentos por ocultar información sobre las negociaciones relacionadas con la demanda marítima", que en su opinión se realizan "a espaldas del pueblo".
Haya o no inventado la historia Bautista, lo cierto es que le ha hecho un flaco favor a la causa marítima boliviana. Aun en el supuesto negado que hubiera ese tipo de conversaciones, se supone que los miembros del parlamento son informados por el gobierno en sesiones secretas, dado el carácter representativo de nuestra democracia.
Algunos comentaristas atribuyen las declaraciones de Bautista a "falta de madurez politica". No es la primera vez que a un parlamentario del MIP se le inculpa de esto, sin que siquiera merezca una amonestación de la Comisión de Etica. En enero, al diputado Germán Choquehuanca se le halló una grabadora durante una reunión reservada para un informe de la cancillería sobre el asunto marítimo.
Quizás a varios de nuestros noveles diputados les esté faltando instrucciones precisas sobre la hermeneútica parlamentaria y la interrelación del Poder Legislativo con los otros órganos del gobierno, especialmente en lo que atañe al manejo de asuntos delicados de la política nacional.
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