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PARTICIPACION, O MUERTE POLITICA
Por
Hernán Maldonado
Me pareció ridículo que el director de PAT, Mario Espinoza, le pagara públicamente 500 dólares - televisión de por medio - una apuesta a Evo Morales, como si ambos personajes estuvieran en una gallera.
Morales había apostado a que el MAS salía segundo en las elecciones del 30 de junio y seguro que ni él se lo creía. Si hubiera sido así, el MAS hubiera inscrito un segundo candidato a la senaturía por Potosi.
La verdad es que el MAS ni soñaba con el caudal electoral que conquistó y por eso es que en Potosí, donde ganó, el suplente del senador elegido, será el otro senador titular. La CNE dejó en manos del Senado que resuelva ahora lo de los suplentes.
Fue una lástima que Morales aceptara públicamente esos 500 dólares. En otras circunstancias quizás, o en el ámbito de la privacidad, pero no ahora cuando llegó a los umbrales de la presidencia de la república.
Y peor todavía porque, en un tono entre sarcástico y burlón, Espinoza le dijo: "ahora te apuesto 1.000 dólares a que no eres presidente". Las carcajadas de los presentes no se hicieron esperar. En el fondo quedó una especie de burla, de abuso de confianza, de un paternalismo insano.
A nuestros campesinos, que ahora llegan al parlamento por decenas, hay que darles un marco de respetabilidad. Llegan al más alto foro del país ungidos por el voto popular y no por bloquear caminos.
En un Congreso multinacional, multiétnico y plurilingüe, resumen de lo que es el país, sería bueno comenzar por erradicar el adjetivo "honorable" (resabio de los usos de los doctorcitos altoperuanos) porque con frecuencia este término se lo utiliza más para ridiculizar que para honrar.
Dado que en un Congreso de 157 parlamentarios casi 40 son del MAS y el MIP, una decisión plausible es el estreno de la traducción simultánea. No hay duda que la mayoría de aquéllos habla y entiende el español, pero les es más cómodo hablar en aymara o quechua.
Por otra parte, el MAS y el MIP tienen que tomar conciencia de que actúan al más alto nivel político y deben hacer buena su predisposición de pasar de "la protesta a la propuesta".
Lamentablemente sus líderes han empezado a excluirse y al no querer pactar con los otros partidos políticos, ellos mismos están empezando a cercarse o limitarse, a segregarse, enfermedades contra las que han luchado por décadas.
Morales, equivocadamente, autoexcluyó al MAS de cualquier negociación con los otros partidos para ser gobierno, lo que le ha valido inclusive una lapidaria crítica de Felipe Quispe, quien le preguntó que "si no quiere ser presidente, ¿entonces para qué candidateó?
El aislarse, el abstenerse, el autoexcluirse en materia política es el suicidio y el MAS incurre en un enorme error al decir: "si quieren, los otros que voten sin condiciones por nosotros".
Esa es una postura miope. La política es un arte, es negociación, pactos, consensos, disensos, diálogo, cesión. Eso de que "no pactamos con los partidos del sistema", es ridículo porque tendrá que hacerlo. Ahora el MAS podía ser gobierno y lo rechazó. ¿Repetirá su conducta a la hora de elegir las directivas camarales y de las comisiones parlamentarias?
¿O dejará también pasar el tren? El Mallku Quispe está preocupado. En declaraciones a Víctor Orduna, del Juguete Rabioso, dijo que Evo "está perdiendo, (porque) nunca más va a haber ese voto; el indígena nunca más va a subir hasta el segundo lugar, (te) acordarás, nunca..."
