Venezuela cocina a leña
Por Hernán Maldonado (*)
En todas las ciudades, hasta en Moscú, vi vendedores ambulantes, desde humeantes perros calientes hasta carteras o relojes de finas marcas, falsificados.
Pero es la primera vez que veo en pueblos y grandes ciudades venezolanas que los buhoneros venden en las calles leña para cocinar…
Este el tamaño del desastre al que el castro-chavismo ha llevado a lo que era uno de los países más prósperos de América Latina hasta finales de los años 80.
Los que se oponían al régimen de Hugo Chávez creían que la pesadilla del Socialismo del Siglo XXI no duraría mucho. ¡Venezuela no es Cuba!, gritaban en las calles.
Y resulta que el castro-chavismo se abatió como una plaga maligna sobre ese país. Los burócratas despilfarraron o se embolsillaron alrededor de 400.000 millones de dólares.
La Cuba castrista le culpa de su desgracia al imperialismo, al bloqueo, etc, pero Venezuela nunca fue bloqueada. El régimen, que ya dura 21 años, cobraba al contado el petróleo que exportaba a la costa Este del imperio, más de 60 millones de dólares diarios, en las épocas en que el crudo se cotizaba en 140 dólares el barril.
Ahora, gracias al maldito socialismo chavista, Venezuela se debate en una miseria espantosa. Más de 5.5 millones de venezolanas emigraron a pie por el continente y los que se quedaron carecen hoy de alimentos, medicinas, repuestos, agua potable, electricidad, gasolina y hasta gas doméstico, de manera que las familias improvisan cocinas a leña, en pleno Siglo XXI.
El desastre, por la devaluación, es tan descomunal que un maestro gana en un mes el equivalente a UN dólar. Solo pregúntense ¿Qué haría un obrero boliviano con un sueldo de un dólar mensual?
La tragedia venezolana es ocultada o disimulada por la prensa internacional, porque de lo contrario, los electores en muchos países lo pensarían muy bien antes de ilusionarse con los logros de la Revolución Cubana o el Socialismo del Siglo XXI.
(*) Hernán Maldonado es periodista. Ex Upi, EFE, dpa, CNN, El Nuevo Herald. Por 43 años fue corresponsal de ANF de Bolivia.