EL "ESCUALIDO" CHAVEZ

Por Hernán Maldonado

El petrodictador ésta vez no se comió su dulce de lechoza. Tampoco apareció en el "Balcón del Pueblo" para alebrestar a sus huestes. Quizás estudia cómo le va a explicar al mundo que obtuvo 35 más diputados que la oposición que fue la que ganó mayoritariamente en las urnas.

Hugo Chávez convirtió los comicios parlamentarios dominicales en un plebiscito y así le ha ido. Con una multimillonaria campaña, con el colosal abuso de los recursos del Estado, la intimidación a 2.5 millones de empleados públicos y el reparto descarado de dádivas, el chavismo logró el 48 por ciento de los sufragios. La oposición el 52 por ciento, según su líder Ramón Guillermo Aveledo.

Ese el resultado más trascendente de cara a las elecciones presidenciales del 2012. Hasta ahora Chávez disfrutada de su mayoria electoral convencido de que sus opositores eran unos pocos, unos "escuálidos". El pueblo venezolano le enchaquetó el calificativo. No pudo comerse, como antaño, su dulce de lechoza.

Si hoy se repitieran las elecciones, quizás Chavez le iria peor porque su Consejo Electoral mantuvo a los votantes en una espera de 9 horas, para dar los resultados, pese a que se ufana de disponer del sistema automatizado "más moderno y confiable que hay en el mundo", según el petrodictador.

En los comicios legislativos del 2005 la oposición se abstuvo y Chavez, con el sólo el 25 por ciento del caudal electoral, se apoderó de las 165 bancas. La oposición se ufana, además, de haberle quitado la mayoria calificada de los dos tercios que le permitía aprobar leyes a capricho. Pero esto está por verse porque hay una media docena de diputaciones en pugna. Por ahora los números son 94-61.

La oposición obtuvo sus mejores triunfos en Táchira 6 diputados a 1 y en el Zulia 12-3. La decepción estuvo en Caracas, cuya alcaldía fue ganada por la oposición hace dos años. Chávez logró 7 de 10. Otro tanto ocurrió en el Estado Miranda, bastión opositor, que dio empate 6-6.

El gran fraude que se le hará difícil explicar a Chávez al mundo consistió en la redistribución electoral de los distritos. Sitios predominantemente chavistas, como Delta Amacuro, de 60.000 habitantes, eligieron cuatro diputados, mientras que en el Zulia o Miranda, 300.000 habitantes eligieron a uno.

Chávez puede alardear de una victoria que no es tal. Lo que lo mantuvo alejado del "Balcón del Pueblo" fue la certidumbre de que el pueblo venezolano le dio el "preaviso", como se dice en el mundo laboral a un empleado que va a ser despedido.

Finalmente otra realidad al descubierto es la manipulación de la voluntad popular a través del casi medio millar de medios oficialistas. Si no, cómo explicar que en un pais con 20 por ciento de inflación, su infraestructura vial destrozada, su red hospitalaria deficiente, inmerso en una gigantesca corrupción, con su agricultura en ruinas y su industria petrolera en declive ¿todavía haya 5 millones de electores que votan por Chávez?