Sin embargo hay algunos factores a considerar y que pasan por debajo de la mesa. ¿A quién le convenció el empate 0-0 con Estados Unidos en Santa Cruz?

Ahora, con motivo de la Copa la Paz de Guatemala, Veira, burlando su propósito de darle oportunidad a nuevos valores, se armó con los jugadores veteranos que llevará a Paraguay en junio y los resultados no son para sentirse optimistas.

Se empató sin goles con Jamaica, equipo que ciertamente estuvo en el Mundial Francia 98, pero que no llevó a Guatemala a sus pocos astros que juegan en Escocia e Inglaterra. Jamaica, una semana antes, había caido 9-0 (nueve-cero) ante Costa Rica en un partido de preparación en San José.

Después le ganamos 3-0 a Guatemala. Todo triunfo es meritorio, pero ganarle a Guatemala no es para exagerar, como nos lo demostraron el domingo los juveniles paraguayos al derrotarnos 3-0, con casi todas nuestras estrellas.

Hago hincapié en lo de juvenil, porque ese Paraguay no es el que estuvo en Francia 98 ni mucho menos. No estaban Chilavert, Ayala, Rojas, Acuña, Benavides, etc, etc. Nos ganó la B de Paraguay. Así de claro.

La primera gira del once del Bambino acabará esta semana en Los Angeles contra México y en San Diego, otra vez contra Guatemala. Y acabará sin el Bambino, que de Guatemala debió regresar a Argentina súbitamente debido (supuestamente) a la mala salud de su padre.

Ovidio Messa se hace cargo del equipo justamente cuando las papas queman. La prensa boliviana reseñó el martes que Veira no tenía visa para entrar a Estados Unidos debido a un viejo problema con la justicia en su país.

Mucha gente se preguntó con asombro cómo es que la Federación Boliviana de Fútbol no se aseguró que Veira contaba con la visa.

Antes de irse a Buenos Aires, el Bambino declaró a la prensa (La Razón de La Paz) que los resultados en Guatemala "estaban dentro de lo previsto". ¿No suena esto a demagogia?

Y en otros frentes las cosas no están mejores. Julio Cesar Baldivieso formuló el propio martes serias críticas a Veira al haber sido "menospreciado" y desde Portugal, Erwin "Platini" Sánchez le hizo saber que "no soy un saco de papas", al sentirse manoseado.

Por su parte el vicepresidente de The Strongest, Alfredo Arnez, fustigó, también el martes, a la Federación sosteniendo que sus dirigentes manipulan al titular Sergio Asbún cobrándole su elección.

Por lo pronto la Federación debe probar con documentos que Veira tiene visa de ingreso a Estados Unidos y que ciertamente su viaje de regreso a Argentina obedeció a causas de fuerza mayor.

No hacerlo implicará una irresponsabilidad monstruosa. No sólo que se deja al equipo a la mitad de camino y desmantelado (Con Veira regresaron cuatro de los jugadores que militan en el fútbol argentino) si no que se le da el timón a Messa en circunstancias nada halagueñas.

¿O es que todo esto estaba también "dentro de lo previsto?