EVO VS ARCE ¿PATRAÑA DEL MAS?

Por Hernán Maldonado

Desde que Bolivia nació a la independencia, los partidos políticos que la gobernaron, especialmente desde 1900, siempre se dividieron, por variadas razones. Ocurrió con el republicanismo, el liberalismo, el PURS, MNR, FSB, PRA, PRIN, POR, PC, PDC, MIR, PS, ADN, y ahora el MAS.

Ocurrió también que en muchas ocasiones los enemigos acérrimos prefirieron pactar con los opositores, antes que con los escindidos de sus filas. Los enemigos a muerte MNR y FSB cogobernaron con Hugo Banzer. El Gral René Barrientos cogobernó un tiempo con el PDC, su feroz adversario en las elecciones de 1966. Etc.

Ahora el MAS se dividió entre los seguidores del caudillo cocalero Evo Morales y de su testaferro, Luis Arce Catacora que, como ha ocurrido invariablemente, le gustó las mieles del poder y quiere dejar atrás la lealtad que le juró a quien lo llevó a la presidencia.

Esta semana el ex presidente Jorge Quiroga sentenció que no cree en la división, porque Morales como Arce fueron una yunta antes y lo siguen siendo. Perdonen la inmodestia, pero eso mismo he estado afirmando desde mucho antes.

Estamos ante un caso que no tiene nada que ver con lo ideológico, como lo que les ocurrió a los partidos políticos que menciones al comienzo. Aquí de lo que se trata es solo de una ambición desmedida de poder por el poder, del usufructo de las “peras”, como lo denominó el presidente Victor Paz Estenssoro.

Puede ser una movida táctica ideada en la Habana, como una manera de aletargar a la oposición, creyendo que sacará fácil provecho electoral de la pelea, lo que ocurriría si Evo y Arce Catacora son los candidatos de sus facciones.

Obvio. Si la pelea llega hasta las elecciones, se pondrá en práctica el “voto útil”. Antes de permitir la vuelta al poder del ígnaro, muchos ciudadanos antimasistas votarian por Arce (“el mal menor”). El verdadero ganador sería el Grupo de Puebla o el Foro de Sao Paulo, así como el bloque ruso-iraní-chino-cubano, con un voto seguro en los organismos internacionales.

Pero también ganaría, aunque parezca mentira, el Zar del Chapare, porque Arce Catacora mantendría la impunidad de la que goza, sin rendir cuentas (porque, como cajero, es también responsable) del colosal despilfarro de dineros públicos en 14 años de bonanza económica.

En la Bolivia político-partidaria, nunca hay absolutos y todo puede ocurrir, dada la precariedad de la situación económica, con más de 3.8 millones de personas en el mercado informal, víctima del galopante narcotráfico, del contrabando, de la parcialización de la justicia, de la destrucción del sistema de jubilaciones, la inflación, etc. etc.

Recuerdo que en 1964 el presidente Paz Estenssoro parecía sólido en el gobierno, hasta que el 4 de noviembre se fue al exilio. El director de Radio Fides, el gran sacerdote José Gramunt de Moragas, era un convencido de que no pasaría nada. Cuando pasó, le pregunté (el cura tenía una amplia y estrecha relación con los diplomáticos acreditados en Bolivia): ¿Qué pasó padre? Su respuesta lacónica fue: Paz, tenía el respaldo del Departamento de Estado, pero el Pentágono pensaba otra cosa… (Poco tiempo después estalló la crisis de Ñancahuazú…)

En Venezuela, el militarote Hugo Chávez Frías, tenía su “Tilin” en el coronel Francisco Arías Cárdenas, Ambos conspiradores del 4 de febrero de 1993. Cuando Chávez adelantó las elecciones porque se hizo aprobar una nueva constitución (¿no hizo lo mismo Evo?), la oposición tenía chance de vencer. Pero…

Urdieron un rifirrafe y en un santiamén se convirtieron en feroces “enemigos políticos”. Cada quien fue candidato por el oficialismo revolucionario del 4F. Les faltó poco para agarrarse de los pelos. Arías Cárdenas soltaba gallinas en sus concentraciones públicas para denostar a Chávez, al que llamaba “señor gallina” (Cobarde en venezolano, por haberse ocultado el 4F pese a ser el jefe insurrecto).

Pasadas las elecciones con el triunfo del “señor gallina” (que resultó ser un pájaro de mal agüero), pronto Arias Cárdenas fue llamado a ser su embajador… y que yo sepa, hasta ahora vive en el extranjero disfrutando de sus millones malhabidos.

¿Podría ocurrir lo mismo en Bolivia entre evistas y arcistas?

En párrafos anteriores les relaté hechos históricos de donde saco que todo puede ocurrir. Ustedes mismos saquen sus conclusiones. No estamos en 1999. Otro es el panorama internacional. Aunque Cuba sigue de titiritero, ya no existe la Venezuela Saudita y tendrá impacto mucho de lo que ocurra en lo que ahora mismo son los satélites del castrochavismo.

Amanecerá y veremos (La genial caricatura es de Abecor ex Página Siete)

Hernán Maldonado es periodista. Ex UPI, EFE, dpa, CNN, El Nuevo Herald. Por 43 años fue corresponsal de ANF de Bolivia.