EE.UU: ¿POR QUIEN VOTARAN LOS CATOLICOS E HISPANOS?

Por Hernán Maldonado

Hace cuatro años el voto hispano le dio el triunfo a Barack Obama y según las más recientes encuestas el candidato demócrata mantiene una elevada popularidad entre estos votantes como para ser reelegido el 6 de noviembre en la presidencia de Estados Unidos.

Un total de 23.7 millones de hispanos están habilitados para votar. El 2008 lo estaban 19.5 millones y un 50% respaldó a Obama. La más alta participación total de la historia se dio ese año: 73.5%. Ahora alrededor de 220 millones votantes están convocados a las urnas.

Una encuesta del Centro Hispano Pew señala que hasta agosto un 64% de los hispanos estaba dispuesto a reelegir a Obama y solo un 27% tenía intenciones de apoyar al candidato republicano Mitt Romney.

Las elecciones presidenciales estadounidenses son indirectas porque en realidad en cada estado se elige a los que integrarán el Colegio Electoral. El mínimo es 270 sufragios por eso la lucha de los candidatos se centra en los estados que eligen el mayor número de delegados.

El estado de la Florida, por ejemplo, es uno de los más apetecidos por sus 29 delegados al Colegio Electoral. 1.6 millones de los electores son hispanos. El diario The Miami Herald apunta que la ventaja hasta ahora lo tiene Obama con 237 votos contra 206 de Romney.

Algo que no se refleja en las encuestas y que podría marcar la diferencia es que la Iglesia Católica está exhortando a los fieles a que voten por quien creen que garantiza mejor la libertad religiosa, lo que en los hechos es un apoyo a Romney.

Esa la gran incógnita en las elecciones de noviembre. Las estadísticas revelan que uno de cada cuatro estadounidenses es católico ¿Cómo votarán?

La Conferencia Episcopal de Estados Unidos está activa ayudando a los fieles a “discernir” entre lo que ofrece uno y otro candidato. Les recuerda, por ejemplo que Romney, como gobernador de Massachussetts, vetó la obligación a los hospitales católicos a pagar medicamentos para provocar abortos, algo que apoya Obama.

También les recuerda que Romney prometió defender la libertad de religión donde quiera que esté amenazada. Obama por 18 meses dejó sin nombrar al embajador en Misión Especial para la Libertad Religiosa.

Contrariamente a Obama, que “destruyó el consenso bipartidista sobre el derecho de conciencia, Romney, como gobernador, trató de proteger a las organizaciones católicas para “que no fueran forzadas a ubicar niños adoptados por parejas del mismo sexo”.

Otro apunte destaca que Romney afirma que ”la libertad necesita de la religión, de igual forma que la religión necesita de la libertad”, mientras que Obama “repetidamente ha reemplazado las palabras ‘libertad de religión’ por ‘libertad de adoración’ que tiene una alcance mucho más estrecho”. Amanecerá y veremos.