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Domingo 18 de mayo del 2008
CHAVEZ, UN POLITICIO "MODERNO"
Por
Hernán Maldonado
Hubo un tiempo en que los presidentes venezolanos acudían a reuniones internacionales cuidando el lenguaje y las formas. Eso ya es historia. Hoy se miente o se dice cualquier cosa con la seguridad de que a las palabras se las llevará el viento o que un apretón de manos o un beso harán olvidar todo.
Acaba de ocurrir en Lima. Hugo Chávez dijo haberle besado a la canciller Angela Merkel tras pedirle perdón por su exabrupto de 48 horas antes cuando le atribuyó groseramente ser representante de la derecha alemana admiradora de Adolfo Hitler. Dijo también que Merkel le invitó a visitar su país, una mentira negada de inmediato por Berlín.
El pecado de Merkel fue declarar que no todo lo que diga el petrodictador representa la opinión de Latinoamérica. Merkel estropeó la felicidad de Chávez tras saber que el brasileño Lula da Silva, aseguró cínicamente hace una semana en Europa que "Chávez es el mejor presidente que ha tenido Venezuela en 100 años". En mi pueblo solían decir que "por la plata baila el mono; por el oro, dueño y todo".
Chávez se estrelló soezmente contra el secretario general de la OEA, cuando José Miguel Insulza esbozó ciertas dudas sobre la vocación democrática del régimen chavista. Pero ahora el chileno es casi un héroe del chavismo desde que descalificó el movimiento autonomista boliviano y alabó la ilegal nueva Carta Magna que se propone promulgar Evo Morales.
Descaradamente el petrodictador ha pedido que se le llame "injerencista, desde este mismo momento", al prometer de que no se quedará de brazos cruzados si peligra el gobierno de Morales. Por supuesto que el señor Insulza está calladito, no vaya a ser calificado otra vez de "verdadero pen..., desde la p hasta la o".
Chávez, a su llegada a Lima, se deshizo en elogios a su anfitrión Alan García, quien ayer nomás era "un corrupto y ladrón de siete suelas", del que había que "poner los bolsillos a buen recaudo".
Ya llenan varias páginas los insultos de Chávez a George W. Bush, a Tony Blair, a Vicente Fox, Alejandro Toledo, Ricardo Lagos, José María Aznar, el Rey Juan Carlos, y al cardenal hondureño Oscar Rodríguez, entre otras altas personalidades mundiales. En casa su récord es atroz.
Ahora le tocó al secretario general de la Interpol, Robert Kenneth Noble, quien es un "miserable, vagabundo, inmoral, payaso" por haber revelado al mundo que los expertos de su organismo determinaron que las computadoras de Raúl Reyes no fueron alteradas en su contenido y que eran de propiedad del jefe narcoguerrillero colombiano.
Chávez quedó al desnudo en sus vínculos con la organización terrorista y eso lo mantiene fuera de si. Ha perdido el sueño porque crece el expediente que lo muestra apoyando al terrorismo. Como no halla cómo salirse del embrollo, exacerba el nacionalismo. Pero el moderno "Flautista de Hamelin" está desafinado, como nunca.
Tiene la enorme fortuna de contar con ingresos petroleros fabulosos y de enfrentarse a una oposición incapaz y dividida. Es un caballo desbocado capaz de permitirse cualquier locura. ¡Ah!, por si se le ocurriera a alguien insinuar que algo falla en su cabeza, ordenó a su Ministerio de Salud que publique en los diarios nacionales avisos prohibiendo a psiquiatras referirse a su salud mental en trabajos académicos o declaraciones a la prensa.
Esto no se le había ocurrido ni a Rafael Leónidas Trujillo, el infame "Chapita" dominicano y más recientemente al ecuatoriano Abdalá "El loco" Bucarán. No hay duda que también es imaginativo.
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