Estado plurinacional castrochavista para destruir las naciones de América

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Estado plurinacional castrochavista para destruir las naciones de América

Por Carlos Sánchez Berzaín (*)

La asamblea constituyente es el mecanismo que el socialismo del siglo XXI o castrochavismo utiliza para destruir la institucionalidad democrática en los países de las Américas e imponer su estrategia de instalar el “estado plurinacional”, reconociendo varias naciones dentro de un mismo estado y fraccionando la “nación” para de destrozar la identidad y la unidad nacionales. El concepto de estado plurinacional es un instrumento castrochavista con el que se instala la división y la confrontación permanente para destruir la nación.

El concepto de plurinacional es herramienta de ataque contra la democracia. Para ello sostienen que el Estado en cuestión está integrado por varias y diferentes naciones, manipulan el concepto de nación para reemplazar el de cultura, desconociendo que desde su constitución e independencia todos y cada uno de los estados han construido naciones con sentido de unidad e identidad propios. Después de más de 200 años de independencia y existencia, cada Estado tiene como base una nación, no varias. La trampa del castrochavismo consiste en suplantar lo “pluricultural” que está integrado en lo nacional por lo “plurinacional” que genera confrontación. No es lo mismo una nación con unidad en la diversidad cultural que varias naciones en un Estado.

Cultura es el “conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, industrial, en una época, grupo social…”. Cultura es el “conjunto de bienes materiales y espirituales de un grupo social transmitido de generación en generación a fin de orientar las prácticas individuales y colectivas, que incluye lengua, procesos, modos de vida, costumbres, tradiciones, hábitos, valores, patrones herramientas y conocimiento”.

La nación es el concepto social de la organización del Estado que es el concepto político. Nación es el “conjunto de personas de un mismo origen y que generalmente hablan un mismo idioma, tienen una tradición común en un territorio determinado”. Diversidad de autores multiplican las definiciones de acuerdo con posiciones filosóficas o ideológicas, pero en sentido amplio se acepta que la Nación “es una comunidad poblacional con un territorio del cual se considera soberano y con identidad cultural”. El territorio esencial a la nación.

Plurinacional quiere decir “múltiples naciones” y como propuesta de confrontación lo presentan como “el principio político que permite aspirar al pleno ejercicio de los derechos de todas las naciones que existen en un Estado”, lo que es básicamente la estrategia de fraccionar territorialmente el Estado porque no hay nación sin territorio.

El planteamiento de lo plurinacional pretende desconocer en el siglo XXI la existencia de la nación argentina, de la nación chilena, de la nación peruana, de nación brasilera, de la nación ecuatoriana, de la nación uruguaya, de la nación colombiana, uruguaya, boliviana, paraguaya y la de todas y cada una de las naciones nacionales en cualquier Estado de las Américas, reemplazándola por la confrontación entre múltiples naciones que supuestamente están en el territorio de cada uno de esos países.

Ecuador fue el primer Estado declarado plurinacional por la Constitución de 2008 resultado de la constituyente de Rafael Correa. Declara “Estado constitucional de derechos y justicia, social, democrático, soberano, independiente, unitario, intercultural, plurinacional y laico”, pero organizado como “República” lo que evidentemente ha disminuido el daño aunque no la confrontación.

La ejecución más avanzada “plurinacional” es Bolivia desde 2009. Con leyes violatorias de derechos humanos, falsificación del sistema de reforma de la Constitución, masacres sangrientas, presos y exiliados políticos, oposición funcional y suplantación del texto propuesto por su propia asamblea constituyente, Evo Morales suplantó la “República de Bolivia” por el “Estado Plurinacional” reconociendo 36 naciones y soberanías para dividir la “nación boliviana”. Así el castrochavismo ha reemplazado constitucionalmente la lucha de clases por la lucha de naciones, de razas, de regiones, ejecutando la premisa del Foro de Sao Paolo de “multiplicar los ejes de confrontación”.

La constituyente de Hugo Chávez dio lugar a la Constitución de Venezuela de 1999, previa al desarrollo de lo plurinacional. Soslaya el tratamiento de la “nación” y se reconoce como “Estado Federal”. Resulta que la organización federal -aunque formal e ineficiente- restringe la utilización de lo plurinacional como discurso.

Con esta misma metodología están ahora bajo presión las naciones de Perú y Chile. El planteamiento de “estado plurinacional” es transnacional y busca destruir la nación peruana y la nación chilena para instituir en su lugar la confrontación permanente.

(*) Carlos Sánchez Berzaín es abogado constitucionalistas, politólogo, 5 veces ministro de Estado en Bolivia y actual Director Ejecutivo del Interamerican Institute for Democracy.