Bolivia: Un solo paso de la grandeza a la miseria

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Bolivia: Un solo paso de la grandeza a la miseria

Por Hernán Maldonado.

Siempre me ha parecido que la traición es la más abominable de las conductas humanas.

Hace más de 2.000 años Judas Iscariote se sentaba en la misma mesa que Jesús, iba con él por toda Galilea, veía los milagros que producía, el amor que desparramaba por doquier y aún así… fue capaz de venderlo por 30 monedas.

Los Judas de nuestro tiempo salen de los laboratorios del castro-chavismo, de sus cerebros malévolos de la inteligencia y contrainteligencia cubana.

Hay decenas de ejemplos. Uno de ellos del teniente coronel Juan Pablo Roque. Llegó a Miami como un refugiado, se infiltró en las organizaciones anticastristas y hasta se hizo líder de Los Hermanos al Rescate, la organización que ayudaba a los cubanos fugitivos hallados a la deriva en el mar.

Era el más activo anticastrista, el más vociferante, el “héroe de la resistencia”, hasta que un día llevó a la muerte a 4 pilotos de Los Hermanos al Rescate y se regresó a Cuba para recibir las rendidas gracias del tirano Fidel Castro.

El movimiento anticastrista recibió tamaño golpe que no se ha recuperado hasta el sol de hoy.
Esa la misión de estos miserables. Causar la mayor decepción entre los luchadores por la libertad… que los desmoralice, los desmotive.

La misma táctica ha sido utilizada por el chavismo en Venezuela. Son incontables los “exiliados” infiltrados entre los opositores. Un solo ejemplo. El ex gobernador Didalco Bolívar, que apareció en Perú tras autoproclamarse furibundo antichavista. Muchos años después, cumplida su sucia misión delatando planes de los verdaderos opositores, volvió campante a Venezuela.

Ahora los bolivianos ven el triste caso el líder de la Resistencia Juvenil Cochala, Yassir Molina, a cuyos pies se rindieron muchísimos bolivianos, por cuya libertad clamaron desde las redes sociales, para cuya familia se hicieron verbenas, kermeses, rifas, etc. etc… ahora aparece como un cobarde traidor involucrando falsamente en afanes golpistas a verdaderos opositores al régimen cocalero.

Cuando me enteré de este asunto expresé mi repudio. Una querida amiga y colega, con ese alto espíritu cristiano que le caracteriza, me sugirió que habría que saber cuáles fueron los motivos que tuvo el jovenzuelo. Un implícita invitación a perdonarlo.

Estoy de acuerdo July. El perdón es una virtud del cristiano. Judas Iscariote no se perdonó a si mismo y se colgó.